Fondo

lunes, 15 de abril de 2013

Chistako


La mujer que sale de fiesta con las amigas tras haber prometido a su marido que volvería a las doce en punto de la noche. La fiesta se desmadra, bailecitos y muchas copas, y la mujer llega a casa a las tres borracha como una cuba. Nada más cerrar la puerta, el reloj de cuco hace "cu-cu" tres veces. Para evitar discusiones con su marido, rapidamente  la mujer hace los nueve "cu-cu" restantes y toda satisfecha de sus reflejos pese al pedo que lleva, se acuesta.

A la mañana siguiente, en el desayuno, el marido pregunta que a qué hora volvió. "A las doce, tal y como te prometí". Él no dice nada y ella está toda contenta por haberle salido bien el truco. "Tenemos que cambiar de reloj de cuco, éste va mal", comenta él. "¿Ah, si? ¿Por qué?" pregunta ella. "Verás", responde el marido, "anoche el reloj dió las tres de la madrugada, luego no se cómo pero gritó ¡HOSTIAPUTA!, hizo "cu-cu" cuatro veces más, vomitó por el pasillo, hizo tres "cu-cú" más, se descojonó de la risa, otro "cu-cu", salió corriendo, pisó al gato, chocó con la cómoda de nuestra habitación, se acostó a mi lado oliendo a alcohol, dió el último "cu-cu", se tiró un pedo y se quedó dormido."

No hay comentarios:

Publicar un comentario